Ya te perdoné que estuvieras casada con ese tarado de Marilyn Manson, pero esto ya es harina de otro costal. Así que pese a tus medias con costuras, tus fajas, tus ligueros, tus corsés y todo el atavío fetichista que tanto nos gusta, ahí te quedas, princesa de fresa.
Pobre Dita... Pues le vas a dar un disgusto...
ResponderEliminarSiempre te puedes convertir en un admirador del lady Beckham... Es coña, of course, esa no le gusta ni a su marido...
ResponderEliminarNo sé quién dijo que las mujeres (y los hombres), son como los autobuses: que si pierdes uno a los cinco minutos viene otro.
ResponderEliminarSólo con su gusto para elegir maridos ya dice mucho de ella eh???
ResponderEliminarYo desde luego, si tengo que elegir, donde esté el Beckam que se quite el raro ese.
Buen finde a todos
Quien dijo eso se conformaba con poco, Antonio.
ResponderEliminarVale más una solo yate que cien autobuses y siendo la realidad que en la vida vemos muchos más de los segundos que de los primeros... pues cada uno que elija el vehículo que encuentre más cómodo.
*Advertencia: durante mucho tiempo no creí en los yates, sólo en los autobuses y de corto recorrido. ¡Pero se me cruzó uno!
Novicia: Ni el uno ni el otro, ni el de la moto.
ResponderEliminarSybarite: Bueno, pues si pierdes un yate, te sientas en el noray y al rato viene otro. Hay más yates.
Qué va, Antonio, yates, lo que se dice yates, apenas se ven. Porque también hay yates horteras, pequeños, viejos... Te dirá más, no necesito un yate, me vale una lancha. Pero tiene que ser Riva :P
ResponderEliminarNo eres justo, Antonio. La chica no ha hecho nada para que el hortera ése se prende de ella (lo del "carapintá" si tiene delito, ¿ves?). Y no deberías dejar que ese macarrilla te pise a la chati. Porque tú vales muuucho más. Jejeje. Además, si mañana, ongamos, ZP dice que le gustan las medias con costura, ¿renegarás de ellas?
ResponderEliminarLo cierto es que si la tomamos a ella como maniquí, Charolito, sigue siendo un maniquí que luce nuestros modeletos. Sólo eso. Una maniquí y tampoco hay que pedirle peras al olmo.
ResponderEliminarSybarite: Pues eso, que si pierdes una lancha al rato pasa otra.
Ya me dirás cuántas Rivas has visto tú en la vida...
ResponderEliminarO sea, no te pongas cabezón. Conozco gente -mujeres y hombres- que sólo necesitan pasear los ojos un instante para encontrar a varios congéneres que encuentran interesantes.
ResponderEliminarYo, lo siento, soy tremendamente exigente.
Admite la diversidad al menos.
Yo también soy exigente. Pero sigo diciendo lo mismo: que un clavo saca otro claro, etc, aunque uno de oro tenga que ser sacado por otro de oro y uno de platino por otro de platino, etc. Cambio el metal que quieras, pero el argumento es el misma.
ResponderEliminar