27 de mayo de 2014

El Cristo del Consuelo

Uno de los recuerdos que guardo de mi padre Juan María es una foto del Santo Cristo, añeja y sepia, con una dedicatoria ilegible en el dorso. Sólo se puede entender «con mucho cariño». Y su firma. La tengo en el cajón de la mesilla, aunque no esté ahí con el propósito milagrero que se le da a este tipo de estampas.

«Dios también anda entre los pucheros», nos recordaba Santa Teresa de Jesús, pero uno no cree en un Dios milagrero que esté pendiente de nuestros actos, controlándolos, porque significaría que no se fía de nuestra actitud y nos obligaría a quererlo. O a imponer su evangelio a punta de pistola, y por decreto ley, y eso sólo osan hacerlo los humanos con sus evangelios laicos ideológicos y sus dictaduras de «hombres nuevos».

Él nos deja libertad incluso para no amarlo o ignorarlo. Una vez le pregunté a don Antonio Salas con qué equipo iría Dios si ambas  aficiones  le rezan para que gane el suyo. «Con ninguno», me respondió tajante, confirmando mi intuición de que a veces Jesús no cumple las plegarias porque no tenemos toda la visión del campo.

¿Por qué permite Dios el mal? es la gran pregunta de la Teodicea que se han hecho filosóficos como Leibniz, Hume, Unamuno o Epicuro (y su paradoja), pero uno no quisiera tener a un ángel detrás de mí apuntándome con una pistola para que no haga el mal. Quiero ser libre para poder ser malo, aunque luego no lo sea por decisión personal. Se lo exijo, le exijo la libertad, aunque perjudique a otros. «¿Dónde está dios, dónde está Dios?», se preguntan algunos tras una tragedia. En la cruz, trabajando, le podríamos responder. Demostrando que él también padece la libertad de los demás.

Trabajando en la cruz como nuestro Santo Cristo que no sé si obra milagros pero sí estoy seguro de que conforta y consuela porque solo con «peregrinar» a la ermita para hablar con él ya provoca el milagro de la fe pues son muchos los ciezanos que se arriman a su vera para hablar, buscar consuelo y pedir, aunque no consigan todo lo que se le pide porque los Reyes Magos tampoco nos traen todos los regalos que pedimos, pese a nuestro disgusto, aunque nuestros padres sí saben por qué. Es la imagen más respetada de Cieza, desde hace años, y eso ya es un milagro en estos tiempos de dioses prefabricados en el hollywoodiense paseo de la Fama.

Publicado en la revista "El ciezano ausente" (2014)

25 de mayo de 2014

Aburridos

La ginecóloga Danièle Flaumenbaum asegura que el 85% de las mujeres se aburren haciendo el amor. Lógico. Si se dedicaran a follar se divertirían más. Tiene uno escrito por ahí que ‘ayuntamiento carnal’ es lo que hacían nuestros abuelos, ‘copular’ es lo que suele hacer un matrimonio y follar es lo que algunos pretenden hacer cuando no está su pareja. Son sinónimos pero no significan lo mismo.

Aunque ahora ya sabemos que los bostezos de algunas no eran por hambre, como parecía, sino porque no se divertían. Qué error, verdad usted, porque nos hemos llevado muchas pizzas a la cama cuando lo que había que llevarles es un crucigrama para que no se aburran. Y que seamos todos más listos.

Muy ‘sapios’, sapientes, porque en España ya tenemos más titulados que personas con estudios primarios. Eso revela la EPA, aunque uno se malicia que lo que hay es más tontos que nunca. O se aprecian más tontos debido a las redes sociales. Porque lo peor de Feisbuk y Tuiter es que ha menudeado la cháchara y ha puesto en contacto a todos los tontos de pueblo, incluidos los de allende los mares. Y cuando digo tontos puede que me refiera a los políticos que ahora nos camelan y convidan al voto, excepto mi estimado Vergara y los ciudadanos ciezanos que, como es lógico, no se presentan a las europeas.

Ya nos advierte el escritor Ricardo Moreno que las ideologías prestan a los que carecen de ideas el mismo servicio que las pelucas a los calvos. Pero no todos los políticos son inútiles o corruptos. No se puede desacreditar la política como servicio público porque los hay honrados y con ideales. Ahí están los concejales del país Vasco que sufrieron persecución, y muerte, y gracias a su resistencia se ha conseguido parar el terrorismo. No se debe despreciar a todos aunque todos parezcan unos inútiles.

Ineptos como el pepero Cañete que ha minusvalorado a su propia hija. O como Jesús Eguiguren que sigue presidiendo el PSOE vasco pese a que ha sido condenado por pegarle una paliza a su mujer. Ejemplar, ¿verdad usted? Nos quejamos de ellos, con razón, pero la supresión de los partidos y los políticos no nos trae el anarco-romanticismo con raya en el pantalón (en el que uno profesa), sino los extremos populistas y demagogos que siguen prosperando en España y Europa. Cerriles como las chicas de Femen que todavía no han enseñado las tetas para protestar por el secuestro de más de 200 niñas por los islamistas pues se conoce que no cuentan porque son católicas. Y nadie las rescata porque no saben de gaseoductos.

Tampoco cuentan los inmigrantes que son rechazados en Suiza tras aprobarse esta borricada en un referéndum popular que, como las armas, los carga el diablo porque además han votado también en contra de subir el salario mínimo. No quieren ganar más. Tienen miedo a perder su trabajo o las prestaciones sociales, pese a que sólo tienen un 3,5% de paro y no nuestro glorioso 26%. Y disponen de dinero sobrao para comprar crucigramas, pasatiempos o pizzas.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza. 

18 de mayo de 2014

Opciones

«Me gustan los hombres inteligentes, creativos, guapos y con éxito», ha confesado Amanda de Cadenet; una presentadora de éxito en la televisión estadounidense. La mayoría de las mujeres los elegirían a ellos si tuvieran esta opción, asegura. Y es lógico, cartesiano, aunque los hombres no somos tan exigentes y nos conformamos con poco: con unas buenas tetas y un buen culo vamos tirando. Aunque también las elegiríamos ‘inteligentes, creativas, guapas y con éxito’ si tuviéramos esa opción, pero vivir en Nueva York tiene ventaja. Han cantado línea.

Y seguimos para bingo porque nos domiciliamos por Spain donde hemos pagado unos sobrecostes en obra pública que equivalen a todos los recortes en Sanidad y Educación. Somos muy cordiales con el dinero ajeno y hemos pasado de ser considerados por los forasteros como «gente que sabe vivir bien» a ser etiquetados como «vagos y corruptos». Y eso no es cierto porque trabajamos mucho y somos el segundo país del mundo que más kilómetros de AVE ha construido, aunque la línea París-Lyon tenga en un año más viajeros que todos los AVE españoles juntos.


Cosas de ser español que lo es todo aquel que no puede ser otra cosa, según Cánovas del Castillo. Sin embargo los judíos sefardí van a pedir la nacionalidad española (y también los moriscos), porque parece que quieren ser españoles mientras nadie quiere serlo o pretenden darse de baja como los independentistas catalanes que se empecinan en el «España nos roba» cuando Cataluña es un 20% más rica que las demás regiones. Será que le robamos poco. Y es sabido que el que roba a un ladrón tiene cien años de perdón, o más, mientras volvemos a oír la «llamada a la urnas», la berrea electoral que algunos preparan con esmero y premeditación.

Muy aplicados porque el pasado miércoles los nacionalistas dejaron claro en el Parlamento que hablar de trasvase del Ebro da calambre. Nasti de plasti. Pero para acallar el voto insurrecto de los sedientos del Levante nos distraen con la zanahoria de un proyecto de travase del Ródano (Francia) que pretende traer el agua por el mar para evitar la berrea electoral de los nacionalistas. Y además sale más barato pues no hay que expropiar tierras.
El gobierno aragonés ha recordado que no habrá jamás un trasvase del Ebro, «lo diga quien lo diga», y la derecha del PP gobierna en Aragón merced al apoyo del PAC, con el compromiso del ‘no al trasvase’.

La derecha cambió el «agua para todos» por los votos necesarios para auparse al poder de donde se infiere que, efectivamente, en España somos un país montaraz que incluso mata a tiros a sus políticos (Diputación de León), aunque sean del mismo partido. Ya hemos dejado atrás el ‘guerracivilismo’ y hemos avanzado hacia el ‘guerrapartidismo’. Y encima algunos se alegran del asesinato porque ya nos advertía Shakespeare que «el odio es un veneno que uno se toma esperando que se muera el otro». Por eso a uno también le gustan las mujeres inteligentes, creativas, guapas y con éxito. Y con tetas y culo, si no es mucho pedir.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza. 

11 de mayo de 2014

Gemelos


Cada persona tiene siete 'gemelos' repartidos por el mundo, según el fotógrafo François Brunelle. Y es cierto. Eso le digo yo a todos, pero los acreedores no me creen y sólo me persiguen a mí. A los ministros, por el contrario, ni los molestan pese a que cada ministerio tenía su propia imprenta (ahora las han centralizado en la del BOE), porque cada ministrillo quería imprimir sus propias tarjetas de visita. Algunos no saben lo mucho que valen 20 céntimos.

Tampoco sabíamos que las carreteras del Estado tenían más de 1.500 contratos de luz y que por fin los han dejado en uno solo para conseguir un mejor precio. Y tal cual ocurre con los seguros de los coches, suma y sigue, porque disfrutamos de AVE con apeadero en cada esquina, desalinizadoras cerradas, piscinas climatizadas en cada aldea y, suma y sigue, pues Artur Más mantiene a decenas de cargos con sueldos de 100.000 euros mientras le niega los fármacos a los trasplantados. No importa. Estamos salvados. Los héroes de la socialista Valenciano son Jesucristo, El Che Guevara y... Felipe González.



Y tan dichosos, oye, que los españoles sí creen que el dinero da la felicidad, según un estudio de Ipsos para la UE. Lo creerán, sobre todo, los que han recibido sobrecostes corruptos del 230% en las obras del AVE, según acabamos de descubrir. Quizás por eso la honrada mayoría es también la más infeliz, excepto los menores de 35 años que sí lo son por aquello de que la ignorancia da la felicidad.

O quizás porque en España existe verdadera igualdad de oportunidades y tanto Barcelona, como Atlético o Real Madrid pueden ganar la liga. O quizás porque la final europea de la ‘Champions’ la juegan dos equipos patrios, mientras España ocupa los primeros puestos del ranking de pobreza infantil. Podemos presumir de lo mejor de lo mejor.

Limpios, pero con hambre, como aquel arruinado hidalgo del Lazarillo que se echaba migas de pan en el bigote para que todos vieran que ese día había comido. Lucidos que no lúcidos porque a veces se nos atraganta pensar por nosotros mismos ¿Pensar por mí mismo?... Amos, anda. En mi periódico y en mi tele ya me dan el pensamiento pensado, digerido y preparado, listo cocina, para ser asimilado sin acidez estomacal. Preferimos la papilla ya pensada.

Así que buen callar, Sancho, porque si quieres animar a la gente escribiendo que lo peor de la crisis ya ha pasado te levantan acta de que eres de derechas. Y si comentas que seguimos enfangados en la catástrofe dan fe de que eres de izquierdas. Spain forever.

Uno no sabe de lo que es porque no me fío ni de mí mismo, me contradigo, pero suelo coincidir con Charles Chaplin cuando decía que su única ideología es la libertad. Pero hay un liberalismo económico (de derechas) y un liberalismo político (de izquierdas). Y un liberalismo (sexual) de chicas liberales que se lo hacen con todos los tíos del edificio, excepto con el portero. Yo era el portero, sí. O uno de mis gemelos.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza. 

5 de mayo de 2014

Espera

Las parejas que esperan para tener relaciones sexuales tienden a ser más felices, según una investigación de la Universidad de Cornell en EE.UU. Esta dicha se explica porque los que retrasan el cuchi cuchi tienen más tiempo para llegar a conocerse y ver si son compatibles.

Así que ya no se estila preguntar en la primera cita «vamos a tu casa o a la mía», sino que te «pongas para cenar jazmines en el ojal» (María Dolores Pradera), es decir, ser prudentes y no acostarte con ellas hasta que su padre haya conseguido el préstamo para pagar la boda.

Y no le perdonamos ni un monaguillo porque si uno se casa lo hace por la Iglesia y hasta con bendición enmarcada de Francisco; un pontífice cercano que ha criticado el liberalismo salvaje que «convierte al fuerte en más fuerte y al débil en más débil», pero también ha dejado claro que el marxismo es un error.


«Los preceptos de Cristo son poquísimos y lo demás son normas revisables», avisa. Y uno de ellos es ser capaz de cumplir en lo pequeño, cambiar al individuo, para que luego la sociedad lo haga por sí sola. Si quiero cambiar la sociedad por decreto acudo a partido político pero si quiero cambiar yo para que todo cambie acudo a la Iglesia. Una Iglesia quizás más misericordiosa pues el papa ha redactado un cuestionario para el Sínodo en el que aborda la comunión de los divorciados, el matrimonio gay o los anticonceptivos. Francisco es un Papa humano que reconoce que ha tenido dudas con la fe. Como todos. El loco no duda jamás, ya se sabe, pero veremos si a Francisco lo dejan obrar o sólo le permiten darle al Vaticano una segunda mano de pintura porque ya lo ha criticado la clerigalla chupacirios y la clerigalla progre de los priscilianos.

Las segundas capas apañan y lucen mucho pero no arreglan, porque el eficiente Valcárcel nos deja en Murcia una autopista que termina en un bancal, dos aeropuertos de mentirijillas, la mayor lista de espera en dependencia, una de las mayores deudas autonómicas, la 9ª región con más paro de toda la UE, el puesto puesto 191 (de 272) en la lista de riqueza de las regiones o una variante de ferrocarril sin vías en Camarillas. Vamos a ser la parranda del cachondeo nacional. No somos serios. Será por el clima.

Porque tampoco son serios todos aquellos que critican que se haya consumido ya el 25% del Fondo de Reserva de las pensiones pues se pensó para situaciones de crisis y si no se hubiera creado ahora no podríamos pagarlas. Y para eso se pergeñó. No está de figurín. Fue un gobierno de derechas, el de Aznar (aunque algunos bufen con espumarajos por la boca), el que pensó en el futuro y creó el fondo que permite ahora pagar las pensiones, mientras otros fulanos meten miedo a los ancianos con que nos la van a quitar. Podemos estar tranquilos, mucho, porque lo único que debe preocuparnos es tener paciencia para esperar a que su padre consiga el crédito para pagar la boda.

Columna publicada en el periódico El Mirador de Cieza.