19 de agosto de 2006

ETA impone la paz

Los terroristas asesinos de niños nos amenazan en su último comunicado con responder si no se cumplen sus exigencias. Y el PSOE y los nacionalistas dicen que no se pagará un precio político por la paz, etcétera, etcétera, tralarí, tralará. Seguimos en las mismas tras treinta años y mil muertos. En lo mismo, en la misma postura y todavía no hemos escarmentado. Qué aburrido es todo. Qué mediocridad. Qué topicazos. Qué chalaneo con los asesinos de niños. Qué hartazgo de volver a lo mismo de siempre. Qué hastío de tener que humillarnos para que nos perdonen la vida. Qué difícil es hacer entender lo que es la democracia. Qué hartura de que las pistolas valgan más que los votos. Qué empacho de "imposiciones de paz".

2 comentarios:

  1. No puedo añadir nada más, Antonio. Completamente de acuerdo contigo de la cruz a la fecha.
    Cuando pasen estos tiempos atroces, nos vendrá a todos la frase de Virgilio al comienzo de La Eneida; "animus meminisse horret"
    (Mi alma reencuentra esos recuerdos con horror).
    Enrique.

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  2. Cuando lleguen esos tiempos, Enrique, estaremos todos calvos, según dicen los castizos.

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