20 de septiembre de 2010

Putas y putos

Un diputado del Parlamento británico ha descubierto que su esposa es prostituta. Que además de ser señora en la casa, era puta en la calle, concretamente en los hoteles donde se prostituía en sus horas libres por 70 libras. Que poca vergüenza tiene.

Cobrar sólo 70 libras. Qué bochorno, oye, porque ya que tienes una esposa puta que al menos se cotice, joder, que esas 70 libras son una vergüenza y un desdoro. Mancillan tu reputación porque no es lo mismo tener una esposa puta de 70 libras que una de 500, hombre, que todavía hay clases, manque le pese a Carlos Marx.

La señora ha reconocido que le gusta el tikitaka: "Me gustan los clientes, los hombres hermosos y el dinero fácil". Y eso está muy bien, divino de la muerte, pero 70 libras es dinero demasiado fácil, hija, que eso es imperdonable. Motivo de divorcio. Porque tener una mujer que sea

una puta scort de lujo es una cosa, pero una puta de saldo es una humillación insoportable que menoscaba tu aprecio.

El diputado ha tenido que dimitir, una pena, porque cuando por fin conoces a una chica que le gusta follar, van y te la quitan. Qué sufrido es ser político. Ahora comprende uno por qué quieren cobrar todavía más. Una crueldad del mismo jaez que aquella propuesta de un pastor evangelista americano para quemar los libros del Corán, con el mismo desparpajo con el que los islamistas queman la bandera norteamericana.

La cuestión es quemar, darle a la cerilla ya sean libros, conventos, coranes, biblias, fotos del rey o el Play Boy, que es lo que me han quemado a mí siempre las novias. Somos una humanidad que cuando no comprende algo lo quema, como los pirómanos han quemado el monte de Calasparra para conseguir un protagonismo que nunca lograrían con sus vidas de oficina de tres al cuarto. La mediocridad quema, como la excelencia alumbra.

La ha reconocido hasta Fidel Castro, el pobre, cuando ha confesado a un periodista norteamericano que “el modelo cubano no nos funciona ni a nosotros”. Cierto. La cuestión es que por decir lo que él ha dicho, aunque haya querido rectificar luego su subconsciente, a uno lo han entronizado como fascista de míralo y no lo toques. Pero bienvenido al club, socio.

Más vale tarde que nuca, que le decía servidor a los profes del colegio cuando llegaba tarde.
Aunque lo cierto es que tampoco podemos pavoneemos farrucos con el fiasco cubano porque en España la derecha murciana ha paralización las inversiones en Sanidad y nos ha llevado a un déficit de 841 millones, sin que nos hayamos enterado, sin que hayamos visto las mejoras que ha reportado esa deuda.

Es como si hubieran comprado un TAC estéreo con elevalunas eléctrico y dirección asistida, que no hemos visto, ni catado. Y en el Centro de Salud de Cieza, los médicos han estado doblando consultas por falta de sustitutos. Una vergüenza. Y una putada. Al menos la del diputado británico cobra. Poco, pero cobra.

(Columna publicada en el semanario de papel El Mirador de Cieza)

3 comentarios:

  1. Bueno, seguro que él también se prostituye políticamente, y su esposa no le dice nada

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  2. Por ella me parece muy bien.
    A la mujer le busca el tiki-taka y el diner facil, perfecto.
    Pero el marido no podía tener otra profesión menos pública, jeje.
    Un saludo.

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  3. Bueno, esta va de cachondeo. No os lo toméis muy en serio. O sí.

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