Los agricultores se manifestaron ayer en Madrid para pedir ayuda al Gobierno pues padecen "la mayor crisis conocida que padece el campo español". Y para reivindicar que se tome en serio la agricultura "como se ha hecho con el automóvil y la banca". Ilusos. Pretenden ser como los banqueros, ahí es na, y tener las ayudas que ellos tienen. Son unos osados. Quieren ser como Botín, que se reúne con Zapatero y cuelga la chaqueta en el respaldo como coleguis, maleducados, por cierto.
Son unos presuntuosos que además no saben que hay que hacer cine para que te subvencionen y ayuden, y quizás deberían plantearse el rodaje de una película para poder pasar por caja como hacen los empresarios amigos del presidente que reciben subvenciones del ICO (como Mediapro, que edita Público), y tienen su domicilio fiscal en Holanda para pagar allí
los impuestos. Que eso mola, mientras ellos no tienen más remedio que pagarlos en España, por cojones, o sea, por imperativo legal. Y así no hay manera de criar un nabo cuando además las grandes superficies te fijan el precio y te chantajean con "o lo tomas o lo dejas".
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