6 de noviembre de 2009

El fútbol, los futbolistas y los piratas

José Bono dijo que prefería morir antes que matar, así que deberían enviarlo a él a Somalia para que muera a cambio de los pescadores secuestrados por los piratas, que han vuelto a amenazarnos con matarlos si no pagamos. Tranquilos, que pagaremos. Tenemos la garantía de Zapatero que es un tipo fiable y buen pagador.

Y a lo mejor les paga con lo que les cobre a los clubes de fútbol a los que les van a subir los impuestos del 24 al 43% para igualarlos con el resto de los países europeos porque España era un "paraíso fiscal" para estos millonarios de la pelota. A partir de 600. 000 euros tendrán que cotizar al 43% como todos los curritos. Los clubes y los futbolistas se han puesto de morritos, como es natural, y nos han amenaza con la fin del mundo (es decir, sin fútbol los domingos). Y luego han sacado la espada flamígera de la presión a los aficionados.

Fue Zapatero el que impulsó en 2006 está reforma para favorecer que los científicos y artistas se afincaran en España, pero los que han venido han sido los futboleros que se lo pasan pipa con la rebaja fiscal, mientras los

demás pagan sus impuestos como todo quisque. Ahora amenazan con la huelga porque en España los que montan el pollo no son los sindicatos de clase, sino los futboleros de clase.

Aunque al Gobierno le viene muy bien la movida, porque cuando la UE vaticina que rondaremos el 20% de paro, el debate se traslada al fútbol y veremos a los prójimos tirándose de los pelos por bares y tertulias, a favor y en contra, mientras el Gobierno silba y los futbolistas nos amenazan con la huelga que suponemos que sólo seguirán los que cobren más de 600.000 euros. Se supone. Porque es de memos que un futbolita de Murcia, por ejemplo, se ponga en huelga para defender los intereses de Cristiano Ronaldo. Aunque todo es posible en esta España de pandereta y fúrbol es fúrbol.

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