Así que Iñaki Gabilondo ha demostrado su talla humana y su rigor profesional al reconocer que se ha equivocado con el reportaje del poliomielítico de la manifestación de las víctimas del terrorismo (eso le honra, desde luego), pero el Partido Socialista ha echado al ruedo el morlaco de la supresión de los toros para que nos distraigamos en el ruedo ibérico mientras nuestros políticos se dan de garrotazos goyescos, se retratan en la España negra de Solana y se iluminan con el esperpento valleinclanesco, o sea, la mismita España de siempre y a mucha honra, sabe usted, porque resulta que un energúmeno del PP canario ha vuelto a sacar el asunto del GAL que ya sabemos que fue un tremendo error de hace años que está amortizado porque el PSOE lo pagó en las urnas. Y otro energúmeno, esta vez del PSOE que responde al nombre de Pepiño Blanco, ha vuelto a sacar el asunto del apoyo popular a la guerra de Irak que también sabemos que fue un tremendo error que ya está amortizado porque el PP pagó este disparate en las urnas. Rogamos pues a los políticos que ante tanta mediocridad manifiesta, intenten por lo menos estar a la altura que el pueblo les demanda y exige. Y a la altura del sueldo que todos les pagamos olvidándose del pasado y afrontando el futuro que es lo que a todos nos preocupa. O lo que es lo mismo: más follar y menos joder.
El de Gabilondo es un gesto que le honra, sin duda, pero que demuestra también el grado de vileza que se puede alcanzar en la manipulación. Ha sido tan evidente que no ha tenido más remedio que reconocer el engaño. Pero frente a este gesto, la contumacia de Blanco y López Garrido demuestra su nivel humano y político. En manos de qué personajes estamos!! Dan asco hasta la náusea. Asco físico, cuando ese Blanco aparece por la tele inmediatamente tengo que cambiar de canal. La impresión manifiesta que da este gobierno es que se les escapan todos los temas de las manos, todos. Menos desenterrar muertos de hace setenta años, eso se les da de vicio. Pero la verdad del caso es que todas o casi todas las familias tenemos muertos que desenterrar, de uno u otro bando. Esto va a parecer el valle de josafat. Enrique
Más follar y menos joder, si señor, o lo que es lo mismo, más cuidar de la viña y menos ponerse ciegos de vino. ¿Pero tu crees que a los rajamantas, cagamandurrios y petulantes, que es lo que son estos políticos del emicirco parlamentario, se les puede rogar que se quiten la túnica sagrada de "señorías" y se pongan en mangas de camisa a trabajar como cualquier hijo de vecino? No hijo noo, eso noo, faltaría más, para eso los hemos elegido, para retirarlos de la calle como se hace con las putas.
Tenéis los dos razón, sobre todo porque Pepiño no ha pedido disculpas e insiste pertinaz en su infamia. Pero es que eso es pedirle peras al olmo. El muchacho es un panarra y no da más de sí. Es lo que hay: mediocridad por todos lados.
El de Gabilondo es un gesto que le honra, sin duda, pero que demuestra también el grado de vileza que se puede alcanzar en la manipulación. Ha sido tan evidente que no ha tenido más remedio que reconocer el engaño. Pero frente a este gesto, la contumacia de Blanco y López Garrido demuestra su nivel humano y político. En manos de qué personajes estamos!!
ResponderEliminarDan asco hasta la náusea. Asco físico, cuando ese Blanco aparece por la tele inmediatamente tengo que cambiar de canal.
La impresión manifiesta que da este gobierno es que se les escapan todos los temas de las manos, todos. Menos desenterrar muertos de hace setenta años, eso se les da de vicio. Pero la verdad del caso es que todas o casi todas las familias tenemos muertos que desenterrar, de uno u otro bando. Esto va a parecer el valle de josafat.
Enrique
Más follar y menos joder, si señor, o lo que es lo mismo, más cuidar de la viña y menos ponerse ciegos de vino. ¿Pero tu crees que a los rajamantas, cagamandurrios y petulantes, que es lo que son estos políticos del emicirco parlamentario, se les puede rogar que se quiten la túnica sagrada de "señorías" y se pongan en mangas de camisa a trabajar como cualquier hijo de vecino? No hijo noo, eso noo, faltaría más, para eso los hemos elegido, para retirarlos de la calle como se hace con las putas.
ResponderEliminarTenéis los dos razón, sobre todo porque Pepiño no ha pedido disculpas e insiste pertinaz en su infamia. Pero es que eso es pedirle peras al olmo. El muchacho es un panarra y no da más de sí. Es lo que hay: mediocridad por todos lados.
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