1 de noviembre de 2008

Velo, femdom (D/s)

Tiene morbo esa especie de velo, mucho mejor que el velo talibán, donde va a parar, porque este lo deja ver todo, se intuye y además provoca un no sé qué muy morboso. Me gusta ese velo que recuerdo de la moda de los años 40/50, de las películas, porque le da un aire de misterio y sensualidad muy perverso. ¿La fusta? También, hombre, también, que todo ayuda.

14 comentarios:

  1. Si de entender del amor se trata, uno confiesa ser lego en la materia a pesar de los años que se supone llevo practicándolo....El amor...Lo otro se supone que también...
    Pero si como aprendiz de las artes amatorias puede uno opinar, opino mi ignorancia y hasta mi suspicacia acerca del duetto amor-dolor que algunos hombres se trajinan con fustas y demás artilugios ad hoc, con tal de entrar en los paraísos ocultos de Afrodita e izar el músculo de la lascivia, que dice la tribu cursi-progre.
    Pero como dice el refrán, palos con gusto no duelen; por lo tanto, que la fusta levante el campanario y que a su propietario le den las doce en punto en donde más le duela o le plazca, que uno es liberal ya para casi todo.
    Un abrazo.

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  2. "Que la fusta levante el campanario y que a su propietario le den las doce en punto en donde más le duela o le plazca" me ha encantado esa frase Hécate. Quizá álgún día termine usándola en algún escrito...
    Creo que la rejilla es parte de un conjunto.. de por si me dice menos que otras cosas... el sujetador es precioso.
    Besitos varios.

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  3. No es el amor-dolor, Pedro Luis, sino la imagen. Lo que significa. Tú lo escribiste muy bien en un poema hace poco y dices que no eres del gremio. En cualquier caso eso es cosa de iniciados, de los que "entienden". Yo tampoco entiendo como alguien puede meter la polla por donde sale la mierda y sin embrago lo hacen (tanto homos como héteros), pese a que ese agujero no está preparado para ello y no se lubrifica ni abre como la vagina. Para gustos, los colores, que decía no sé quién. Que cada uno haga con su vida lo que le dé la gana.
    Eria: Efectivamente: la rejilla es el complemento y lo importante son otras cosas. Tú sí que entiendes y lo entiendes.
    Un beso.

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  4. En definitiva, Don Antonio, uno sólo sabe enhebrar la aguja por el "agurejo" de toda la vida, y para que me den las doce en punto no necesito más que un buen paisaje curvo lleno de mujer y unos ojos que te digan: Come por donde más me/te guste.
    Una brazo

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  5. Pues aunque no lo creas yo también soy un clásico, aunque hay imágenes y situaciones que me gusta retorcer para reflejar el alma humana. Si te alarmas por lo que aparece en este blog, te recomiendo que no leas mi próximo libro porque uno de los personajes principales es una puta que cuenta las "guarradas" que hace con muchos clientes: desde "lluvia dorada" hasta rollo sumiso con un travesti.

    Pero no son mis fantasías, qué va, porque si siempre me ha costado mucho contárselas a mi novias, comprenderás que no las iba a contar aquí para que todo el mundo las lea. Con mi foto, mi nombre real y mi dirección oficial. Aunque no lo parezca, soy muy pudoroso.

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  6. No, no, no...No es eso. A mí ya no me alarma ni me escandaliza nada, excepto el mal gusto y la zafiedad, y de eso no he encontrado nada en tu blog.
    Tengo tus dos primeros relatos y no me perderé el complemento de la trilogía; seguro que aprendo cosas nuevas.
    Un abrazo

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  7. No es trilogia, Pedro Luis. Aquéllo del Argaz (Cieza) se ha acabado. Esta historia es diferente y transcurre en una plaza de una pedanía de Murcia. Y los personajes no salen de esa plaza.
    Es diferente.
    Un abrazo

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  8. Es que lo "vintage" siempre ha tenido su morbo...
    La rejilla ante los ojos, un fetichismo más al zurrón...

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  9. Es cierto, Enrique. Todo lo vintage tiene mucho morbo. La rejilla que tapa la cara, pero no la tapa, además de morbo fetichista, es elegante. Muy elegante.

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  10. ¿Con la rejilla o con la fusta?
    Es broma, Mamma, pero espero que nos cuentes esas "ideas".

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  12. hmmm... de momento sólo había pensado en la rejilla, pero yo nunca descarto nada a priori... se puede seguir pensando...

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  13. Tienes sentido del humor, Mamma, y eso es muy importante.
    Enhorabuena.

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