1 de septiembre de 2008

Usted es un tirano y no hay pueblo que lo aguante

Un delincuente como Rodríguez Menéndez sale de la cárcel con un permiso, se va a una comisaría y se hace el pasaporte para huir de España, sin que los responsables del negociado consulten el ordenador para ver la situación del sujeto.

 Podría haber acudido al mercado negro, como suelen hacer los delincuentes, pero este calvatrueno conoce el paño y sabía que no había problema en esta España de Zapatero y Chiquilicuatre, para que la misma policía le dé un pasaporte a un fugado de la cárcel. Lo que me extraña es que no le compraran el billete de avión y lo escoltaran al aeropuerto.

No es un sainete, ni una evidencia de la España bufa y chapuza, sino la modernidad de Zapatero; la España de progreso que además calla, asiente y consiente cuando el rockero punk cubano Gorki Águila es detenido durante cuatro días por "peligrosidad social", es decir, por criticar al poder, a los hermanos Castro. Los cerriles burriciegos
de España han justificado en 20 Minutos la detención porque lo habían denunciado los vecinos por drogarse y "por hacer ruido". Y a petición del "jefe del sector".

Qué siniestro suena eso de "jefe del sector", es decir, "chivato comisario de escalera o de barrio". Aunque bien mirado eso de encarcelar cuatro días a los que fuman porros y hacen ruido, o botellón, no está tan mal y al final se va a tener uno que ir a Cuba para descansar y poder dormir en la tranquilidad de la paz de Castro. Aquí los niñatos revolucionarios apoyan el botellón y los porros, pero justifican que se encarcele en Cuba a un rockero por hacer ruido con la guitarra y fumarse unos petas.
Al final lo han soltado con una multa debido a la resonancia internacional que ha tenido el caso, aunque en España sus colegas callaron y consintieron porque sólo Miguel Bosé, Alejandro Sanz y Loquillo, pidieron su libertad tras ser detenido, sólo ellos, porque ya ha advertido Loquillo que su demás colegas callan "cuando les tocan el dinero". O se cuelan, con privilegios, como en los mejores tiempos del franquismo.

Loquillo, claro, es "una marioneta al servicio del imperialismo, que trata de dar una imagen diferente de la oposición contra revolucionaria", según los amantes de la libertad entre rejas que piden el regreso de los "soviets". "Los soviets pa' tu puta madre", que es la letra de la canción que le voy a escribir yo a al grupo punk de Gorki.

Pero lo cierto es que al cantante punk lo han detenido durante cuatro días porque se conoce que como Fidel y su hermano ya tienen a medio Cuba en el exilio o en la cárcel, sólo le quedaba el rockero a mano con el fin de no aburguesarse y perder las buenas costumbres, porque las dictaduras son como las armas, que si no se engrasan y usan, se enrobinan y encasquillan. Y no disparan.
Nota.- Aquí dejo la canción "El comandante" del grupo Porno para Ricardo de Gorki Águila."No coma tanta pinga, comandante, usted es un tirano y no hay pueblo que lo aguante".

9 comentarios:

  1. No sé de que nos extrañamos, la verdad. ¿Cuándo y dónde se han cebado con los que no son unos desgraciaos?? Porque de toda la vida de dios los más pringaos han sido los que han pagado por sus errores (que me parece fenomenal, desde luego), pero para mí no es lo mismo fumarse unos mais que traficar con farlopa, la verdad....

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  2. Sí, Novicia, pero la cosa no va por ahí. Es más grave.

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  3. El Ultimo de Balmoral1 de septiembre de 2008, 11:09

    Buenos días Antonio:

    Que asco de "pensadores únicos". Pinché el enlace que dejó de Kaosenlared y realmente, me he quedado de una pieza. Como justifican todo esto los analfabetos que ahi escriben...
    En fin... Supongo que a mi me detendrían y juzgarían en un sistema de ese tipo, por mis gustos y aficiones...

    Por cierto, es la segunda vez que saca a Jose María Sanz en diez días. Agradecido por ello...

    Un abrazo

    UB

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  4. Leí hace meses las conversaciones de Sabina con Fernández Flores, interesante y ameno libro. En sus páginas, Sabina justificaba la dictadura castrista con argumentos como que la educación o la sanidad es una maravilla. Argumentos (U otros parecidos) que justificarian también una dictadura como la de Pinochet o la de Franco, sin ir más lejos. Pero a él y a su sectarismo no le importa. El daltonismo cultural de estos próceres es enorme.
    Y claro, ahora calla absolutamente; él, que es tan locuaz...
    Eso si, me parece un artista estupendo y un letrista magníficio. Como persona me cae bien, bastante bien, hace lo que quiere con absoluta libertad (cosa que en Cuba quizá no podría hacer). Pero claro, no comulgo con ruedas de molino, ni sabinianas ni de andie.

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  5. Balmoral: Es que Loquillo es un tío íntegro, honrado y profesional, que condena el embargo a Cuba, por ejemplo, pero también la dictadura. Criticar a Castro no es criticar a los cubanos, de la misma forma que criticar a Franco no era criticar a los españoles.

    Enrique: Sabina me cae bien, es como Loquillo un gran profesional, pero como tipo coherente deja mucho que desear. No se puede justificar nunca una dictadura ya sea fascista, comunista o familiar como la de los Castro.
    PD.- Franco también daba becas con las que estudiaron, estudiamos, la mayoría de lo que ahora se dicen de izquierdas. Y eso no justifica el franquismo.

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  6. Y es que a Loquillo como a muchos más de nuestra generación nos gusta la Coca-Cola... y eso imprime carácter.

    :-)

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  7. La Cocacola y la libertad, Pura, que es más espiritosa que la Cocacola y sólo nos faltaba a estas alturas tener a un hijo puta chivato comisario de Jefe de Sector.

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  8. Recuerdo hace tiempo en una de esas tan "interesantes" tertulias políticas llenas de progres oír a una señora periodista ella, que parecía muy lista, y cuyo nombre no recuerdo ni falta que me hace decir, que la dictadura de Castro tenía algo de romántico...y se quedó tan a gusto...y no era lo mismo que las de derechas...

    A mí Loquillo, me vuelve loquilla....

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  9. Es la doble moral, Merce. La revolución de Castro fue justa en sus principios, tenía su justificación, pero con el paso del tiempo se ha convertido en dictadura. Y una dictadura es una dictadura, ya sea de izquierdas o de derechas.

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